DUDA, DUDA, DÚ.
Esta situación de confinamiento y desescontrafinamiento, de prohibiciones para el tanga por un lado y animados festivos locales locos por otro, de imposiciones estrictas para las que se exige rigurosa etiqueta, y condescendencias amistosas de “viste como quieras, neno”, dependiendo del humor de los políticos de turno y latitud me esta confundiendo las pocas neuronas que me van quedando en buen uso y que seguramente ya no pasarán la ITV obligatoria en un hospital