ROBINSON CRUSOE
Sin noticias del mundo, estás solo en tu isla, Robinson. Es la única manera de ser medianamente feliz hoy. Solo en tu isla, con algunos libros y sin que te llegue rastro alguno de lo que sucede ahí fuera. Si te acercas a la orilla verás que te rondan los tiburones pero no tengas miedo. Ellos muestran altivos su aleta de exterminio: los políticos, los mercaderes, los banqueros y algún que otro corsario hambriento que