Sí dadá, no bahhbahh (o sea, balar)
Un día grande. Porque hay gente que no bala sino dadá vida a la creatividad y el arte auténtico, ese que sirve para elevar el espíritu humano que no ovejero. Parte de esta gente que no circula en la vida por el carril del jefecillo político que da pitas-pitas, nos acompañó en la jornada de ayer. Da gusto ver a personas como Alfonso Armada, un extraordinario periodista que actualmente dirige el que para muchos es el mejor