Estimado alcalde, rivalice también, y que no le importe copiar la idea, con el alcalde vigués en esta medida que presentó ayer. Porque es muy necesaria para Ourense, donde hay pintadas que lastiman a la vista por simple estética pero otras, además, porque insultan y vejan o inducen al odio a instituciones públicas; esta última muy cerca del propio Ayuntamiento. Copio a continuación la noticia.
“Tolerancia cero”. Así de rotundo se manifestó ayer el alcalde, Abel Caballero, al anunciar una campaña contra las pintadas a la ciudad. Lo hizo tras visitar labores de limpieza en la calle Cervantes. “Iniciamos una campaña especial para borrar las pintadas y el vandalismo con grafiti”. Dos equipos con cinco operadores y dos sistemas diferentes en vehículos especializados trabajan con agua caliente a presión y otros métodos, que se utilizan según el tipo de superficie. Los equipos se centran ahora en las calles Cervantes, Urzáiz y María Berdiales, pero ya han actuado en un total de 39 calles. Caballero también adelantó que el Concello movilizará a policías locales de paisano para actuar contra los responsables de los graffitis. “No vamos a dejar que campen a sus anchas pintando la ciudad de manera indeseable”, dijo. La ordenanza de Convivencia Cidadá establece multas entre 300 y 750 euros.