Decir Sunca es decir Luis, Luis Carballo hijo, más conocido entre nosotros. La bella Sunca es portuguesa, de ese país que hoy estamos alabando muchos pero no sé si con intereses políticos porque conozco a muchos que siempre miraron al país vecino por encima del hombro. No así lo hizo Luis, enamorado de la bella Sunca y de Lisboa, donde has situado a su “La Moderna” en lugar de restauración de referencia nacional. La casa está en Belem y no tienen más que seguir la ribera del Tajo para llegar a La Moderna, donde son los mejores anfitriones que uno pueda elegir, lo digo por experiencia propia. Pero pese a estar donde están y entre la belleza singular de Lisboa, Sunca y Luis no dejan de venir a otro lugar de ensueño, Panxón, donde bien podrían haber hecho otro distinguido confinamiento hogareño.
Sunca divisando los barcos que entran por el Tajo
Luis pintando lo que se le pasa por la cabeza
Sunca y sus libros