Como sabéis los que seguís esta página, elcercano apuesta por la literatura entre otras actividades que son nuestra razón de ser y que se vinculan con la comunicación y la cultura, mayormente. El caso es que el lunes, con motivo de una nueva presentación de un libro en Madrid, volvimos a vernos con distintas personas que tienen la deferencia de acompañarnos en estos actos, cosa de agradecer, pues sentir el calor humano siempre es importante. Nos vimos, nos acompañaron, pero además nos trajeron regalos muy preciados. Fantástico. Es el caso de Diana Carrión, encantadora mujer que conocí en la presentación del Cuaderno de Hollywood de Alfonso Armada y que anteriormente lo había traducido ella al rumano por editarse en aquel país. A mayores de traerme toda su afabilidad que es inmensa, me regaló esta joya de su compatriota Coman Sova, el libro de poesía La copa llena de ángeles, que me encantó y recomiendo a cualquiera lector de poesía; pero, por si fuera poco este hallazgo que me proporcionó, Corina me lo dedicó con tanto afecto y distinción hacia elcercano, que tan solo puede quedar agradecido y sentirme muy satisfecho. El otro caso es el de dos paisanas de arenal con las que es fácil estrechar relaciones por su entusiasmo con los libros y el buen hacer editorial (De Conatus da gusto verlo); ellas me obsequiaron con la novela que todavía no presentaron y recién salida de taller, Cuánto azul, de Percibal Everett y que estoy a punto de hincarle el diente cuando acabe otras lecturas que tengo a medio hacer. Silvia y Beatriz, o Beatriz y Silvia, son estas dos mujeres de la editorial De Conatus que están empeñadas en hacer las cosas tan bien que da gusto compartir inquietudes y consejos.
A las tres, Diana, Silvia y Beatriz, gracias por darnos tanto calorcito en este invernal tiempo. Con ellas y otras personas como ellas nunca nos sentiremos solos, aún en la más que probable derrota comercial. Besos