Ha llegado un papel escrito en ordenador sin firmar ni identidad en el sobre sellado desde Santiago de Compostela y por POSTAL EXPRESS (como si nos fuéramos a ir hoy de donde estamos y seguiremos estando, al menos por un tiempo) que nos alienta a seguir haciendo cosas porque vemos que le damos vidilla a esta ciudad. Los que sufrimos en diversas ocasiones este modo de actuar de los cobardes que se ocultan tras el anonimato para podar su rabia incontenible, ya estamos acostumbrados y por ello nos resbala un tanto. Solamente nos provoca un sentimiento de pena y hastío por ver a nuestro lado (me imagino que andaría por el lío que critica pues de lo contrario es tonto por hablar de oídas) a elementos tan poco inspirados y destructivos con la inspiración de otros. En fin, qué le vamos a hacer, hay gente para todo y todo está muy bien.
Anónimo
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1 comentario en “Anónimo”
La gente ya no sabe insultar, difamar o insinuar malévolamente. Este anónimo parece redactado por un twitero adolescente incapaz de una redacción, sino brillante, al menos legible. Oscar Wilde escribió con nostalgia sobre la decadencia de la mentira. Me temo que a la vista de la redacción y pobreza imaginativa de este anónimo habrá que pensar en la decadencia de la “anonimidad”.