Y llegó Natalia con su libro Volando Alto a elcercano. Presentada por un Fortes, Carlos, que estudiaron en aquel mítico colegio de hijos de médicos en Guadalajara, que fue vanguardista en la época y que como todo proyecto que se precie por disruptivo y nada convencional no duró más que unos cuántos años. Carlos no leyó el libro que presentó pero el oficio de estos profesionales de charlas y conferencias parecía demostrar lo contrario; no es el primero ni será el último, pues en el caso de Carlos, razones de mucho trabajo en el último mes significa que con tanta escasez hay que dedicarle todo el tiempo a sembrar laboralmente cuando hay ocasión. Lo importante, en todo caso, era conocer a Natalia, su historia y su receta para enfrentarse a una vida cuyo inicio no fue el más feliz que se pueda tener. Mucha gente arropándola y comprando su libro que ella no cede ni siquiera a la insinuación a Planeta, porque quiere conducir su historia y sabe que si cede a gran editorial o Ana Rosa Quintana, que ya la quiso llevar a su programa, puede írsele de las manos.
La foto de abajo es de Marc Moreno a su esposa Bea Conde-Corbal, en luna de miel a su manera, porque la manera de ellos es la bohemia, fotógrafo ella y el diseñador gráfico y patinador. Dos encantos de persona que viajan por la vida sin demasiado equipaje, con un perro precioso acompañándolos y esa ternura que deja asomar Bea en el paraje solitario donde aparcan su furgoneta y sacan sus sueños a pasear.
1 comentario en “Natalia”
Buenos días elcercano.com,
Ha sido un auténtico placer poder presentar a una persona tan especial, como es Natalia y su tan querido y preciado proyecto VOLANDO ALTO, que si bien es cierto, no he tenido tiempo de leerlo todo, he visto lo suficiente para darme cuenta que se trata de una obra, que como dice el dicho, “cuando el lector está preparado, llega tu libro”. Se trata de una obra atemporal que puede facilitarnos respuestas a aquellas preguntas que nos hacemos constantemente.
Muchas gracias por vuestra acogida y cariño.
P.D.: Monchiño, me encantaría llamarme Carlos, pero por un tío de mi padre retornado de Argentina, decidieron llamarme Pablo. Un FORTES abesiñoabrazo a todos.