Aún sabiendo todo lo anteriormente expuesto, que se puede resumir diciendo : Para alcanzar un grado elevado de consciencia, cualitativamente distinto del normal, es muy útil intentar meditar diariamente, sin embargo solo es posible alcanzar ese cambio cualitativo de la consciencia, cuando cesan los pensamientos, y esto tiene que ocurrir expontanea y naturalmente, de modo que no depende solo de nuestra voluntad, ni de nuestra práctica constante solamente, bien entendido que si estas no se realizan, el cambio de consciencia seria mucho mas dificil que se produjera. Por lo tanto, todo lo que aqui se expone es imprescindible saberlo para el iniciado, incluso es conveniente empaparse bien de ello. Pero todo eso y por mucho mas que supiera, no deja de ser un conocimiento intelectual como otro cualquiera. Intentar meditar ha de ser para él como si toda esa masa de conocimientos fuese como una sustancia material, que se disuelve en agua pura sin que quede rastro de ella, aparentemente al menos, pero que sabemos que no se ha evaporado, sino que está ahi formando un todo homogeneo con el agua en la que esta disuelta. Es decir que se ha convertido en sustancia de todo nuestro propio organismo. Ya no hay diferencia entre lo que somos y lo que decimos, pues forma parte de nosotros mismos, de nuestra sustancia. Esto ya no seria un conocimiento intelectual mas del tema, ni tampoco estar muy avezados o empapados del mismo, sino que es verdadera MEDITACION, es dejar de ser ego para convertirse en SER. Ya no hay que buscar nada porque ya se ES. De todas formas esto tambien puede ser un sutíl concepto que disimuladamente el propio ego inconsciente le está haciendo creer al yo consciente, y este salga con distintas autojustificacione o defensas del mismo para no “morir” del todo.
El Satori o iluminación, es una fusión auténtica del ego con el SER, y pasado un tiempo muy variable, cuando el SER quiera, por decirlo de una manera comprensible, puede reaparecer o no ese estado de conciencia total. Pero de lo que no tengo ninguna duda es de que este estado de conciencia, poco tiene que ver con lo que en la psicoterapia de Rogers se conoce como “Insight”, que son momentos de gran comprensión instantanea, que surgen por autodescubrimiento y que son inatrapables para el intelecto. Indudablemente que estos esclarecimientos momentaneos de la consciencia del si mismo, pueden ir en la dirección verdadera, pero no tienen el sentimiento y la plena consciencia de totalidad del Satori.
Ademas, aún suponiendo que el iniciado haya llegado al Satori, eventualmente, es necesario que realice el camino descendente, como explico en mi libro titulado: “La Parábola de la Vida”, para que “Las montañas vuelvan a ser las montañas”, aunque de otra manera, y asi el meditador alcance el grado de integración completo, mas allá del ego y por lo tanto mas allá de iluminación o no iluminación. Por supuesto que es una persona iluminada, pero en su consciencia no existe la dualidad : iluminación o no iluminación. Esta es la caracteristica fundamental, a mi modo de ver, de la persona realmente iluminada. De todas formas debe haber distintos grados y estados de iluminación y solamente un auténtico maestro, es a quien se considera autentificado para valorarlos.