No nos debe pasar desapercibido que cuando queremos y dejamos a un lado los intereses partidistas los ourensanos podemos llegar a compromisos y acuerdos beneficiosos para nuestra ciudad, La prueba la tuvimos el 7 de junio que no debe ser recordado sólo por la reprobación del Alcalde de Ourense, sino también porque todos los concejales de los cuatro partidos votaron sin fisuras para que la titulación de físicas se vuelva a impartir en el Campus Universitario de Ourense, una titulación que en mi modesta opinión nunca debió suprimirse. Casi coincidiendo la Junta de Titulación de Física dio su visto bueno (15-3), hoy tendríamos que estudiar las razones porque hubo tres votos en contra, final de camino largo, demasiado largo, que se inició en el verano del 2012 en el que varios profesores de Físicas no tuvieron vacaciones, las dedicaron a construir la vía curricular detallada de la titulación de Físicas, casi un año después aún estamos en esta situación sin solución, ni ha sido suficiente que el TSXG declarara nulos los acuerdos que supusieron la eliminación de la titulación en el Campus de Ourense. Con todo a favor aún hay una solución clara, tiene que ser el Rectorado de la Universidad de Vigo y definitivamente el Consello de Gobierno quien decida, de ser aprobado ahora volvería a impartirse en el curso 2014-15. ¿Las sentencias no están para cumplirse?.
Esta unión en Ourense debe de continuar, la razón jurídica la tenemos, no debemos permitir que no vuelvan los estudios de Físicas, ya estoy leyendo y escuchando que no habrá suficientes alumnos, que hay que hacerla internacional, debe ser una figura implantada en todo el mundo y que desconozco. Las mismas razones utilizadas para la supresión, que nunca entendí, se van a utilizar ahora aunque con distinto discurso. Ourense puede y debe tener Físicas, creando sinergías con las otras titulaciones del Campus que proporcionarán beneficios para la ciudad y provincia, recurriendo a una colaboración estrecha del Parque Tecnolóxico y las empresas de los Polígonos Industriales siguiendo la estela de otras universidades. El Consello de Gobierno de la Universidad de Vigo debe tomar la decisión rápidamente, hay cumplir con la sentencia y no buscar recovecos para retrasar la implantación o denegarla.