El último tango en París
Estimado Moncho:
El último pleno que he seguido de la Diputación Provincial de Lababia, ha sido un espectáculo maravilloso. Qué plenitud de gestos huecos, de frasecillas, de sorbetes de nariz. Me tiene encandilado esta televisión local en bucle,pero no sé si seré capaz de soportar otra copa de este licor tan altamente graduado.
El Maestro de Ceremonias, un capitel dórico, historiado con media sonrisa supuestamente irónica, que parece estar sacándose con la lengua un trozo de chuletón de la muela del juicio, va dando paso a los diferentes actuantes: “Tiene la palabra el representante de…” ¡Qué gran circo era aquel de los hermanos Tonetti!
El portavoz del PP no dice más que fruslerías, pero parece que la sangre fría del zorro viejo que ha almacenado para un trasplante, le hace aparecer como campechano y mesurado. Podría ser un gran Papa, reparte bendiciones urbi et orbi con la mano anillada. Ha perdonado más vidas que Nerón en sus banquetes, pero en realidad, después, manda la cicuta por mediación de los pretorianos. Cómo ya se ha ganado una estatua con pedestal de ruedas de molino en su pueblo, se siente seguro hasta con una camisa de fantasía de feria. Trabaja mucho este hombre acaparador de cargos, listo como un allo y cantando esa misa solemne está en su salsa y en su merengue.
Todo lo contrario que el portavoz de DO, que en sus primeras batallitas sale un poco escornón, como un toro manco, que va al bulto pero solo acierta en el caballo de cartón. Parece que una cosa es predicar y otra dar trigo, así que salpica alpiste a la bancada de enfrente en la que no picotea nadie, de momento.
El portavoz del psoe se defiende con unos ataques de doncella histérica falsamente ofendida y con el calor de la refriega se le hiela la sonrisa de la suficiencia socialista histórica. Tendrá que tomarse un complejo vitamínico, o tal vez anabolizantes, si quiere llenar un poco la chaqueta…
El portavoz del BNG, respetuoso, ecuánime, mira para el cielo en busca de ayuda divina, y calla; se ha confundido de reunión y aun cree estar soñando en la siesta que echa después de las asambleas de la ONU, adonde cree que ha acudido.
Y mientras tanto el moderador se esponja como un pichón en celo porque después de tanto tiempo ya no es a él a quién insultan, y ya se ve ganando posiciones con la sardina ensartada arrimándola a la brasa que no quema, como la de la llama del amor romántico.
La chica nueva de Ciudadanos es la princesa prometida que no quiere ofender a nadie, nunca se sabe las vueltas que da la vida
El resto de figurantes en esta ópera bufa cantan por lo bajo la melodía de sus teléfonos móviles, absortos en noticias imprescindibles porque, como a nosotros, aquello les importa poco. Unos muñecos (y muñecas) hinchables, con resorte en el codo, serían más baratos para los contribuyentes.
La Diputación de Lababia seguirá siendo el juguete de un muchacho que, con un tractor amarillo, coloca parches de asfalto de adormidera en los cruces de caminos para que circulen sin sobresaltos los autobuses que acarrean votos, mientras el noventa por ciento de su presupuesto se va en gastos de personal. Un gran ejemplo de administración eficiente, de gestión punto com; y para colmo se han subido las retribuciones. Es lógico: no podemos quedarnos obsoletos.
Una delicia de show que nos promete tardes más felices si estamos bien comidos para poder soportar toda esta venta al por mayor de baratijas y pajas mentales que les ponen duros los bolsillos y a nosotros blandas la meninges.
Atentamente,
Lázaro Isadán