Mis amigos y Tsipras
Bueno, lo primero es confesarles que ando bastante perdido. No a causa de consultar más de cien veces al día el móvil, pues no padezco todavía de nomofobia (miedo a salir de casa sin el aparatito que envía continuas señales reclamando la atención cual si fueran sirenas de Ulises que encadenan las entendederas neuronales). No, la confusión de hoy va de Tsipras, Atenas, Grecia, Europa. Tal vez su poso venga de muy lejos, con la