Nadie en la sala. Sólo el idiota. Mejor dicho, el creador del Jardín de los Idiotas. O sea, el autor, que no es ningún idiota. Los que vinieron persuadidos por la costumbre de dar por leído lo que se repite de continuo, a pesar de que estaba clara el anuncio de la NO PRESENTACIÓN celebraron con cerveza o vino la entrega del libro que coeditaron. Y el autor los dedicó, aún por encima. Me encantó la idea del amigo Carlos García-Manzano, porque ha superado con creces la fórmula fobia de presentaciones de otros escritores, que nunca han podido escapar del compromiso de presentar su libro en público. Carlos, sí. Y ahí está en la sala, sólo, sin nadie que le pregunte, tal como se puede apreciar en la fotografía. Por cierto, el libro pinta fenomenalmente y lo tenemos a la venta en elcercano por un precio de lanzamiento de 10€; después de Reyes será su precio 15€.
Carlos y la No presentación de su libro
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