Y vino un nieto de Sixto Seco
Es amigo intimo de Pablo. Vino desde Madrid para la ocasión. Hay que querer mucho a una persona para tener este gesto hacia él. Pero a mí esta visita me trajo inevitablemente a la memoria a mi padre, porque Sixto y él fueron grandes amigos, ambos traumatólogos, y compartieron muchas cosas en su vida, entre otras el amor a Galicia y sus persoeiros. Crearon, entre otros miembros más, la Fundación Otero Pedrayo, en el caso