VECINOS Y BOCINAS
En la casa de vecinos, proletaria y modesta torre de babel en la que a duras penas intento vivir los últimos años de mi desdichada vida, desprendiéndome de veleidades que en nada ayudarían a una vida sosegada, desprendiéndome de envidias de inalcanzables estatus burgueses, de deseos de ascensiones inútiles a clases aristocráticas, perdedoras del tiempo de los esclavos en las fincas gobernadas por los procónsules, los mentados vecinos hacen tanto barullo de noche y